Soñarse tullido insinúa impotencia para realizar lo que se planea.
Soñar a otras personas tullidas, inválidas, insinúa que no se tiene fe ni confianza en quienes están cerca, por ejemplo en los socios o empleados.
Se trata de un sueño de muy mal agüero, y que afecta negativamente a todos los aspectos de la vida. Es desaconsejable emprender negocios nuevos y hay que tener extremo cuidado en los que ya se tienen, con todo, no será posible evitar los daños.
Es presagio de que se verá notablemente disminuida la capacidad profesional y se cometerán errores muy difíciles de reparar.
Es muy posible que en la vida familiar y afectiva se sufran enfrentamientos y surjan graves discusiones. En cuanto a la salud del soñante, muy probablemente se verá afectada, y se puede ser presa de una enfermedad grave.