Soñarse en una fiesta suele ser un buen signo, especialmente si la gente baila alegremente y vestida de forma decente o elegante, pues esto insinúa prosperidad para el soñante.
Soñarse triste en una fiesta indica que pronto recibirá malas noticias, incluyendo la probable muerte de algún ser querido.
Soñarse en una fiesta en la que hay servidumbre insinúa infidelidad en el matrimonio pérdidas en los negocios o pleitos por celos entre amantes.
Soñarse en una fiesta con ebrios escandalizando indica que la hipocresía de algunas amistades le causará pérdidas y otros daños.
Soñarse como anfitrión en una fiesta en la que hay desorden ocasionado por el vino, indica que pronto será víctima de ingratitudes y calumnias.
Soñarse en una fiesta de niños sanos y alegres indica que desea formar una familia y un hogar feliz.
Cuando el (la) soñante es joven y soltero(a) insinúa que se desea disfrutar de diversiones, fiestas, paseos, etc.
Soñar una alegre fiesta de ancianos, por ejemplo en un asilo, insinúa que los negocios marchan bien por el momento, pero ya se piensa en qué condiciones llegará a esa edad.
Soñarse bailando en una fiesta insinúa que espera buenos resultados en sus actividades.
Una mujer que sueñe una fiesta insinúa que espera el regreso de cierto amigo que se fue con una rival, pero no confía en que esto se realice.
Soñarse en una fiesta suele anunciar alegrías y beneficios, pero también indica que se es indiferente ante la realidad de la vida| es decir, que se inclina por los placeres fugaces, lo cual dará resultados negativos.
Soñarse en una fiesta en la que hay alboroto, discusiones y pleitos insinúa que pronto se enfermará el soñante o su familia.
Soñarse llegando tarde a una fiesta insinúa que se sufrirán vejaciones y humillaciones.
Indica también que el soñante evade sus responsabilidades, prefiriendo depender de otras voluntades.