Soñar explosiones de cualquier tipo insinúa que sus asuntos van empeorando y que fácilmente pueden llegar a una crisis.
Soñar caras afectadas de alguna manera como consecuencia de una explosión insinúa que en el futuro inmediato el soñante resultará responsable o culpable de daños y males que sufran otras personas.
Soñar una explosión que produzca abundante humo, vapor o polvo, insinúa que en el soñante hay confusión e inconformidad en relación con su conducta y asuntos.
Soñarse víctima de una explosión que produce quemaduras insinúa que intereses ajenos, aprovechando la tolerancia del soñante, pretenden crearle problemas.
Una mujer especialmente si es joven, que sueñe lo anterior, debe vigilar sus relaciones sentimentales, porque una persona hipócrita con malas intenciones pretende dañar su reputación.